Las montañas de Hochcschwab son famosas por sus pistas y rutas de esquí, siendo su pico más alto de unos 2.277 metros. En su base es donde se encuentra este lago tan especial. En invierno se trata de un parque normal, con sus flores, árboles, caminos y bancos. Sin embargo, cuando llega el buen tiempo, la nieve que se encuentra en las montañas se derrite y desciende hasta el parque, que se inunda de agua.
Es un sorprendente lugar, porque en las épocas de frío, podremos pasear por él como si fuera otro sitio de recreo cualquiera, pero en en primavera y verano, nos encontraremos con una altura de hasta 9,40 metros de agua. Por ello, en esta temporada del año, podremos nadar y bucear entre bancos, sendas y veredas; así como contemplar a los peces que viven entre flores terrestres, ahora bajo el agua.
Otro de los aspectos interesantes es la coloración del lago. Aparte de tratarse de un agua pura y cristalina, debido a que procede de la lluvia, la nieve o el hielo, su pigmentación es verdosa. Ello es debido a que todo el prado, junto con su manto de hierba y sus árboles y arbustos han quedado sumergidos bajo el agua.
No cabe duda de que esta maravilla natural es un milagro de la naturaleza que no nos podemos perder.